Fortalézcase
Usted ha recibido ya mucha información. Ahora, es el momento de centrarse en el entrenamiento de fuerza. Estos son algunos de los muchos beneficios del entrenamiento de fuerza:
Ayuda a fortalecer los músculos.
Mejora el equilibrio y ayuda a prevenir las caídas.
Ayuda a reafirmar y tonificar los músculos.
Facilita el transporte de la compra o la realización de otras tareas.
Previene la pérdida de tejido muscular que se produce con el envejecimiento.
Mantiene los huesos fuertes.
Ayuda a su cuerpo a mantener niveles saludables de azúcar en la sangre.
Ayuda a su cuerpo a quemar más calorías.
Quita la tensión de las articulaciones.
Ayuda a bajar de peso y no volver a subirlo.
Le ayuda a mantenerse sano a medida que envejece.
Importante
Manténgase seguro.
Recuerde hablar con su proveedor de cuidados antes de cambiar su rutina de ejercicios.
Fortalecer su núcleo es importante
El núcleo es la zona que rodea el tronco y las caderas, también llamada torso.
Esta zona del cuerpo incluye todos los músculos de la sección media, la parte delantera, la espalda y los laterales.
Todos estos músculos sostienen la espalda y equilibran el cuerpo.
Aquí hay 2 ejercicios para ayudar a fortalecer su núcleo:
Rotación del tronco
Recuéstese de espalda en el piso con las rodillas flexionadas y su espalda en una ubicación neutra. Tosa y mantenga la postura para tensar los abdominales.
Manteniendo los hombros en el suelo, deje que las rodillas caigan lentamente hacia la izquierda. Muévalas solo hasta donde le resulte cómodo. No debería sentir dolor, solo un estiramiento.
Utilice los músculos del tronco para tirar de las piernas hasta el punto de partida.
Repita el ejercicio hacia la derecha.
Contracciones
Túmbese de espaldas y coloque los pies en una pared con una flexión de 90 grados en las rodillas y las caderas.
Tosa y mantenga la postura para tensar los abdominales. Imagine 2 puntos en una línea vertical en su abdomen, 1 por encima y 1 por debajo de su ombligo. Imagínese unir esos puntos.
Utilice los músculos del tronco para levantar la cabeza y los hombros del suelo. Cruce los brazos sobre el pecho, en lugar de colocarlos detrás de la cabeza. Levante la cabeza a no más de unos pocos centímetros del suelo.
Mantenga la respiración durante 3 veces, luego vuelva a la posición inicial y repita la operación.