Meseta de la pérdida de peso

Cuando se pierde peso, es común llegar a las mesetas. Son momentos en los que parece que no puede perder más peso aunque siga con su plan. Es normal.

Su cuerpo se está acostumbrando a su rutina y trata de mantener un determinado peso o "punto de referencia".

No se preocupe, puede superarlo.

He aquí algunas formas probadas de hacer frente a una meseta de pérdida de peso:

Si quema más calorías de las que ingiere, verá que pierde peso. Es posible que todavía esté perdiendo peso, pero es demasiado poco para que se note en la balanza.

¿Ha aumentado su consumo de calorías? Asegúrese de que el tamaño de las porciones no ha aumentado y de que el recuento de calorías es correcto.

Aumente el número de minutos de actividad por semana.

Nuestro cuerpo se acostumbra a los programas de ejercicio y aprende a realizarlos quemando menos calorías. Es posible que necesite aumentar la duración de los ejercicios. Intente algo nuevo o más difícil. Pruebe diferentes actividades para que se esfuercen otros músculos.

Si no está seguro, consulte a su proveedor de cuidados sobre un nuevo programa de ejercicios.

Los músculos son muy buenos para quemar calorías. El fortalecimiento muscular regular, incluyendo la jardinería pesada y el levantamiento de pesas, dará un impulso a su pérdida de peso.

Recuerde sus razones para perder peso. Además, pida apoyo a sus amistades y familiares.

¿Le ayuda alguna de estas ideas? Si es así, ¡excelente!

También puede pedirle información a su proveedor de cuidados o administrador de cuidados. Su proveedor de cuidados puede descartar cualquier afección que le impida bajar de peso. También pueden aconsejarte sobre otras formas de perder peso.

Puede enviarle un mensaje a su administrador de cuidados en cualquier momento.